El impuesto de circulación varía mucho de unas capitales a otras. Aquí te explicamos cómo ahorrar en el pago de este impuesto y cuáles son las ciudades más caras y las más baratas para usar el coche.
La enorme diferencia que puede llegar a existir en el impuesto de Circulación entre los distintos municipios españoles ha sido estudiada por AEA (Automovilistas Europeos Asociados). Los ingresos por este concepto para las arcas superan los 3.500 millones de euros anuales; cada ayuntamiento tiene potestad para fijar la cuantía de este gravamen, de ahí que haya enormes disparidades entre lo que se paga en cada localidad. Las cifras son escandalosas: entre lo que ellos llaman «paraísos fiscales» y las localidades más caras, la variación puede superar el 600%:
- Vehículo de más de 20 CV fiscales en Melilla: 56,00 euros.
- Vehículo de más de 20 CV fiscales en San Sebastián: 346,32 euros.
Debido a estas diferencias, se da la paradoja de que existen ayuntamientos en los que el número de coches «inscritos» supera varias decenas de veces al de los vecinos residentes en dicha localidad. ¿Por qué? Porque empadronando allí tu coche puedes beneficiarte de un impuesto más bajo. Las empresas de alquiler de coches o renting lo saben, lo que da lugar a que cinco municipios españoles (Robledo de Chavela, Moralzarzal y Collado Mediano, en Madrid; Relleu, en Alicante; y Aguilar de Segarra, en Barcelona) concentren el 30% del total de coches de empresa de toda España.
Impuesto de Circulación: las capitales de provincia más caras y más baratas
Como cada año Automovilistas Europeos Asociados (AEA) ha analizado las tarifas del Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica entre diversos municipios españoles. Por el comparativo realizado se evidencia la existencia de “paraísos fiscales” para algunos automovilistas. Así, un vehículo tipo medio, por ejemplo, de 11 CV, paga en el Ayuntamiento de Melilla 17,04 euros; en Madrid 59,00 euros y en San Sebastián 85,78 euros.
Respecto de las motocicletas las diferencias son aún mayores. Una motocicleta de 600 centímetros cúbicos paga en Melilla 15,15 euros. Sin embargo, en Vitoria este mismo vehículo paga 81,35 euros.
Este impuesto fue creado en España hace más de treinta años y genera unos ingresos anuales de más de 2.000 millones de euros a los ayuntamientos.
Qué es la potencia fiscal
![El impuesto de circulación sólo tiene en cuenta la potencia fiscal del vehículo.](https://images1.autocasion.com/actualidad/wp-content/uploads/2014/05/Reportaje-impuesto-Circulación-1-300x200.jpg)
La potencia fiscal no tiene absolutamente nada que ver con la potencia nominal del coche, sino que se trata de una cifra obtenida según una fórmula; ésta fue determinada en cada país para establecer los impuestos que debía pagar cada automóvil. En el caso de España, la fórmula para obtener la potencia fiscal está registrada en el Real Decreto 2822/1998 del 23 de diciembre de 1998, recogido en el Anexo V del Reglamento General de Vehículos. Consiste en multiplicar la cilindrada del motor por el número de cilindros y una constante que depende del tipo de propulsor (2 tiempos, 4 tiempos, diésel…):
Pf = T (0,785 x diámetro del cilindro en cm x carrera del cilindro en cm) elevado a 0,6 y multiplicado por el número de cilindros.
T es una constante que equivale a 0,11 para motores de 2 tiempos y 0,08 en el caso de los de 4 tiempos.
En España, además, los impuestos se calculan en distintos tramos, dependiendo de la potencia fiscal del vehículo:
- Vehículos de menos de 8 CVf: la provincia más cara es Vitoria, con 25,37 euros y la más barata es Melilla, con 6,31 euros.
- Vehículos entre 8 y 12 CVf: las provincias más caras son Ciudad Real, Granada, Huelva, Oviedo, Palma de Mallorca, Santander, Tarragona, Teruel y Valladolid, con 68,16 euros, mientras que la más barata vuelve a ser Melilla, con 17,04 euros.
- Vehículos entre 12 y 16 CVf: la provincia más cara es Vitoria, con 151,08 euros y la más barata, Melilla, con 35,97 euros.
- Vehículos entre 16 y 20 CVf: la más cara es San Sebastián, con 276,10 euros; la más barata, de nuevo Melilla, con 44,81 euros.
- Vehículos de más de 20 CVf: otra vez la más cara es San Sebastián, con 346,32 y una vez más, Melilla es la más barata, con 56,00 euros.
Cómo pagar el impuesto de Circulación
El impuesto de Circulación del vehículo se paga en el municipio donde esté empadronado el titular del mismo. Una persona empadronada en Logroño no puede «inscribir» su coche en Albacete… aunque sí puede residir allí: una cosa es tu lugar de residencia y otra, el sitio en el que estés empadronado. En el dorso del recibo se indican las formas de pago, así como los plazos legales para evitar sanciones y recargos.
Normalmente, todos los ayuntamientos ofrecen las siguientes posibilidades:
- Directamente en ventanilla: acudiendo a las oficinas municipales correspondientes.
- En entidades bancarias concertadas: los ayuntamientos disponen de acuerdos con diferentes bancos o cajas donde se pueden hacer los pagos; en el propio recibo figuran los nombres de dichas entidades.
- Vía telemática: si se dispone de firma digital, es posible realizar el pago a través de la «Oficina Virtual» de la web del municipio, en el apartado de impuestos.
- Por domiciliación bancaria: se puede domiciliar el pago del impuesto de circulación de manera automática en la cuenta del titular.
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