Mini ha presentado la sexta carrocería de su gama, basada en el Mini Cabrio. Pudimos probar la versión Cooper S, la segunda más potente del catálogo por detrás de la John Cooper Works, que tal vez sea la motorización ideal. Un verdadero juguete con el que disfrutar de cada viaje.
Es una pena que no esté aquí para ver los derroteros que ha tomado su criatura pero, lamentablemente, Sir Alec Issigonis nos abandonó a finales de los ochenta. Este turco de ascendencia griega y afincado en el Reino Unido es el padre del Mini original. Su intención fue diseñar el automóvil urbano definitivo. Consiguió crear el coche con más volumen de habitáculo en proporción a su volumen exterior de la historia (algo que hasta el nacimiento del primer Mercedes Clase A no consiguió ser batido).
![El frontal del Mini Roadster es espectacular. Ojo con el faldón.](https://images1.autocasion.com/actualidad/wp-content/uploads/2012/02/Mini-Roadster-2012-presentacion-300x200.jpg)
El resultado fue un coche que pese a sus reducidas dimensiones tenía un diseño llamativo que hizo que las estrellas y la alta sociedad de la época lo apadrinaran y ahí cambió todo. Nació para ser una herramienta utilitaria y se acabó convirtiendo también en un símbolo de estatus. Luego un tal Cooper pensó que algo tan pequeño podría resultar divertido de conducir y efectivo y vaya si lo consiguió. Con algo más de potencia y puesta a punto llegó a batir a coches muy superiores en el mítico Rally Montecarlo de 1964. Ya tenemos los genes del nuevo Mini Roadster: coquetería, vanidad y prestaciones en un frasco relativamente pequeño.
Con esta nueva carrocería ya son seis las opciones que los posibles clientes de Mini tienen a su disposición: berlina, Cabrio, Clubman, Countryman, Coupé y Roadster. Si hasta ahora con menos opciones han conseguido vender nada menos que 2 millones de Minis, sin duda las nuevas versiones deberían abrir las puertas a nuevos clientes potenciales.
Hace poco más de dos años que se presentó el primer concept en Frankfurt y era casi un «gol cantado» que se llevaría a la producción en serie. Aunque ha sido necesario un buen trabajo de rediseño, BMW no lo tenía nada difícil para desarrollar este modelo, ya que el molde existía: el Mini Cabrio. Además de la obviedad de la pérdida de las plazas traseras, el Roadster es algo más bajo para acentuar su agresividad, algo a lo que también contribuye su parabrisas 13º más inclinado. Este punto resulta todo un acierto desde el punto de vista estético, pero tiene una contrapartida para los que amamos los coches abiertos y es que, el borde superior del parabrisas, queda muy retrasado y nuestra cabeza queda más carenada bajo éste, quitando parte de la sensación de ir descapotado.
![Esteban López, responsable de formación técnica de BMW España, nos explicó las intimidades del Mini Roadster.](https://images1.autocasion.com/actualidad/wp-content/uploads/2012/02/Mini-Roadster-Prueba-300x200.jpg)
En la oportuna rueda de prensa nos mostraron varios detalles técnicos como la capota electro hidráulica (opcional, de serie es manual y sinceramente más recomendable, ya que se maneja de forma muy sencilla, nos ahorramos 20 kg de peso y menos complicaciones susceptibles de dar averías), los arcos de seguridad anclados al suelo con refuerzos estructurales, sistemas de seguridad activa como los controles de tracción y estabilidad, las luces de freno con función de destellos en frenadas fuertes,etc. Mención especial tuvo el spoiler trasero retráctil que se eleva por encima de los 80 km/h y se pliega al reducir por debajo de 60 Km/h. Con él desplegado se reducen las fuerzas ascensionales del eje trasero en 40 Kg a velocidad máxima, si bien su efecto empieza a notarse a partir de los 120 Km/h.
El Mini Roadster Cooper S en marcha
Por fin llega el momento de dar una vuelta en el nuevo Mini Roadster. El rutómetro estaba muy bien elegido y el día era perfecto: sol pero sin las temperaturas veraniegas que hacen más aconsejable cerrar la capota y encender el aire acondicionado.
![Esta carretera desde La Granatilla era perfecta para disfrutar del Mini Roadster.](https://images1.autocasion.com/actualidad/wp-content/uploads/2012/02/Mini-Roadster-2012-6-300x200.jpg)
Los acabados están a la altura de las circunstancias; los materiales son bastante buenos y el diseño ya característico de los interiores del nuevo Mini cumplen la misión para la que se ha creado este Roadster: llamar la atención y gustar.
La unidad de pruebas con la que pude rodar era un Cooper S, y a la vista de cómo iba, creo que es la ideal. La potencia de la versión JCW se me antoja excesiva para el concepto de coche y para el chasis del Roadster. Para conseguir un tacto deportivo han elegido un tarado de suspensiones bastante rígido. Esto y no tener techo es una mala combinación ya que, todas las imperfecciones de la carretera repercuten en los anclajes de la suspensión y del motor, provocando crujidos y movimientos del marco del parabrisas. Si además de la suspensión rígida sumamos neumáticos de perfil bajo con una carcasa muy rígida, saturamos la estructura.
El motor del Cooper S es una verdadera maravilla. Empuja desde abajo y respira muy bien en alta.Tiene un rango de utilización muy amplio y el escalonamiento de la caja de cambios es perfecto. El escape emite un sonido no demasiado elevado pero sí muy ronco, lo que resulta muy atractivo pero, con el paso de los kilómetros acabaremos por desear una tonalidad menos retumbona en la sesera.
![El motor del Cooper S tiene potencia más que suficiente para el tipo de automóvil que es.](https://images1.autocasion.com/actualidad/wp-content/uploads/2012/02/Mini-Roadster--300x200.jpg)
Este motor va tan bien que nos acabamos animando, la dirección tiene una asistencia muy buena pero no me acaba de gustar como va la unidad de pruebas. Tiene un entrada en curva muy ágil, el morro entra en el giro en el mismo instante en el que se lo indicamos con el volante pero, las correcciones son imprecisas y en línea recta a alta velocidad, el morro del Mini Roadster parece el de un perro de caza siguiendo el rastro de una presa, busca las imperfecciones del asfalto y nos hace complicado no zigzaguear. Es el tacto típico de un coche con la convergencia de la dirección demasiado abierta y los demás compañeros que probaron otras unidades no notaron ese comportamiento, así que muy probablemente se debiera a un mal alineado de la dirección del que llevaba entre manos.
Si el asfalto está un poco roto, la sequedad de las suspensiones hará que notemos como protesta el chasis del Mini Roadster y, aunque esté en perfecto estado, la tremenda adherencia del generoso calzado nos permite un paso por curva tan elevado que también notaremos como el chasis protesta.
[auto_quote quote=»Disfrutar con todos los sentidos» quote_title=»Un cabrio como terapia» quote_description=»Las sensaciones que se perciben al conducir descubierto, hacen que deseemos disfrutar del momento y cambia nuestro ánimo.»]
Al final acabaremos por bajar el ritmo y conducir como un cabrio se disfruta de verdad: disfrutando del recorrido con una visión del entorno inmejorable y sintiendo todos los olores y matices que el paraje en el que nos encontramos nos pueda regalar. Si además hemos hecho una buena selección de la música, nos convertiremos en los protagonistas del mejor videoclip que nos podamos imaginar. En este escenario, el Mini Roadster es sencillamente perfecto. Por eso creo que el Cooper S es la versión ideal. Por un lado nos permite ir relajados en marchas largas gracias a su par motor, y por otro lado, si queremos hacer un adelantamiento (buscaremos perdernos por carreteras secundarias con este coche) tenemos una reserva de potencia que nos sacará una sonrisa de los labios.
Con la capota cerrada, el Mini Roadster está bastante bien aislado pese a la sencillez de la misma. Ajusta bien y la luna trasera de vidrio ayuda mucho en este aspecto. Sin embargo es una pena que esté desprovista de una capa interior que mejore el aislamiento y oculte el esqueleto de la capota, que está completamente a la vista y da una sensación algo pobre en un interior tan repleto de detalles.
La guantera más grande del mundo
![El maletero de 240 litros tiene una trampilla hacia el habitáculo que lo convierte en la guantera más grande del mundo.](https://images1.autocasion.com/actualidad/wp-content/uploads/2012/02/Mini-Roadster-Prueba-2012-300x200.jpg)
La practicidad no tiene porqué estar reñida con el estilo y el carácter lúdico del Mini Roadster, que posee un maletero bastante generoso para las reducidas dimensiones de este automóvil. En total tenemos capacidad para 240 litros, con formas muy aprovechables. Además la tapa del maletero es bastante amplia y facilita el poder introducir en él bultos grandes.
Entre los asientos delanteros hay una trampilla que comunica con el maletero, de este modo tenemos una guantera tras los asientos de nada menos que 240 litros, la más grande del mercado. Lo cierto es que esa trampilla da mucho juego ya que además de permitir que podamos introducir unas tablas de snow board o bultos alargados, también podremos dejar en el maletero cosas que no queramos dejar a la vista sin que nos vean los posibles cacos meterlas en el maletero, ya que podremos hacerlo desde nuestro asiento.
La gama Mini Roadster
Yo pude probar el Cooper S, pero no es el único disponible desde ya en los concesionarios. Concretamente, el Mini Roadster, se puede elegir con 4 motorizaciones y ,todas ellas menos el JCW ( John Cooper Works), pueden ir asociadas a una caja de cambios automática de convertidor de par de 6 velocidades.
- Mini Roadster Cooper 122 CV por 23.700 euros.
- Mini Roadster Cooper S 184 CV por 28.750 euros.
- Mini Roadster SD diésel 143 CV por 28.750 euros.
- Mini Roadster John Cooper Works 211 CV por 35.265 euros.
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