El pasado 30 de junio se cumplieron 60 años desde que, en 1953, el primer Chevrolet Corvette salió por las puertas de la factoría. Seis décadas después, el mito sigue tan vivo como el primer día gracias al nuevo Corvette 2013, el más potente y veloz hasta la fecha.
El Chevrolet Corvette nació el 30 de junio de 1953 como respuesta a los éxitos de ventas que los pequeños deportivos descapotables europeos estaban empezando a tener en los EE.UU. con modelos como el Porsche 356 y el Austin Healey. General Motors no podía permitir que le ganasen en su propio terreno y respondió con un modelo deportivo muy alegre y de buenas prestaciones, acababa de nacer un mito.
Este año se presenta el último miembro de la saga -que va ya por la séptima generación- recuperando el nombre de Stingray y con el honor de ser el Chevrolet Corvette más potente y veloz de todos.
Sesenta años dan para muchas anécdotas y aquí están las más importantes protagonizadas por el Chevrolet Corvette:
- El Corvette es el automóvil deportivo que más años lleva en producción.
- Nació como un concept en el salón de Autorama de enero del 53 y su éxito fue tan grande que se decidió su fabricación en serie el 30 de junio del mismo año en una serie de 300 unidades.
- Los primeros Corvette eran todos blancos con el interior rojo. Costaban unos 2.800 euros de la época. Actualmente se ha subastado uno de ellos rozando el millón de euros.
- Hasta 1955 todos los Corvette montaban un motor de 6 cilindros en línea. Ese año se introdujo el motor V8 opcionalmente y más del 90 % de las ventas se concentraban en esa mecánica, por lo que el 6L se abandonó en 1956.
- Desde 1953 hasta 1963 todos los Corvette eran descapotables. Por su décimo cumpleaños recibió la carrocería cerrada con doble luneta trasera denominada Sting Ray, un éxito que dobló las ventas del modelo.
- Casi 1,6 millones de Corvette se han fabricado. El medio millón se alcanzó en 1977, el millón en 1992 y el millón y medio en 2009.
- El Chevrolet Corvette MY 1983 no se vendió al público, todas las unidades de ese año se destinaron al desarrollo del Corvette C4 presentado en 1984 y que supuso un cambio radical para el modelo.
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